Schevenhüte archivos

De Düren a Schevenhütte

11/06/2015 Donnerstag, caminando hacia Schevenhütte

Etapa corta con llano y poco monte, el paisaje cambia poco, a veces más llano que monte y otras más monte que llano. Donde hay llano cultivos, en el monte todo bosque de arboles. Cuando entramos en los bosques es como si apagaran la luz, pocas manchas de sol llegan al suelo.

Hoy queríamos haber terminado la etapa todavía antes, en Kloster-Wenao, donde está la capilla de Santa Catalina. Según nos habían informado, allí había una comunidad religiosa que acogía peregrinos. La debió de haber pero ya no estaba. Sólo unas casas de campo y la capilla. Han sido muy amables con nosotros. Nos han indicado que por allí adelante había algo.

Y hemos seguido, claro. Schevenhütte estaba muy cerca y según estos últimos informadores no tenía ningún sitio para pasar la noche. Pero llegando a Schevenhütte hemos preguntado con el habitual ‘bite, pánsion, joutel’ y nos han contestado «¿perdón?». Un matrimonio, que veranea en San Emiliano, León. Con las banderas de Colonia y España en un mástil, en el jardín. Han telefoneado a un hotel, nos han dado la dirección, apenas un kilómetro adelante. Y nos han dado dos cervezas Mahou para el camino.

Solidaridad en el Camino

Hemos continuado hasta el primer banco y allí estábamos decidiendo, mientras nos bebíamos las cervezas, sobre el dar el premio de ‘alemanes buenos del día’ a esta pareja, cuando ha aparecido, montado en su bicicleta, el señor, para ofrecernos su casa. Le hemos agradecido mucho su ofrecimiento, pero teniendo sitio no queremos molestar a nadie. Con esta acción, este matrimonio pasa a ser ‘alemanes buenos, cum laude’.

Esta ultima frase me ha hecho recordar mi laúd. Mira, ahora me pondría a tocar un ratico.

Estamos en el hotel Behebacher Hof. No hemos querido desayuno porque mañana nos queremos ir pronto.

Hemos comido en un restaurante alemán muy chulo, carne de cuadrúpedo empanada, con champiñones, ensalada y patatas fritas. Y cerveza.

Por la tarde una vuelta por el pueblo, muy pequeña la vuelta, como pequeño es el pueblo.

Mañana iremos a Aquisgrán, Aachen, Aix-la-Chapelle, que así se llama en español, alemán y francés. También merece una buena visita, está enterrado en su catedral, según dicen, y no tengo porqué dudarlo, Carlomagno.

Para poder hacer una visita en condiciones tendremos que ir a velocidad de autobús, si vemos que corriendo detrás nos cansamos mucho, tendremos que subir. Ya se verá.

Hoy he tenido 19 comentarios para aprobar, casi me habéis hecho llorar, de uno en uno los aguanto, porque soy un hombre fuerte, pero seguidos me iban ablandando poco a poco. Muchas gracias a todas y a todos (el lenguaje sindical, que no me lo quito de encima).