De Oloron Sainte Marie a Sarrance
24/07/2017 Lundi, caminando hacia Sarrance
Hoy me he levantado tarde y he salido más tarde que ningún día. A las ocho aún estaba tomando un café en un bar que he encontrado abierto.
Veinte kilómetros se hacen en poco más de cuatro horas.
Todo el camino lloviendo intermitentemente, inpertinentemente. En una mano el bastón, en la otra el paraguas, y en los momentos que dejaba de llover, foto.
Lluvia sin viento, el paraguas era suficiente. No he querido ir por el camino.
No es de extrañar tanta agua, tanto río, tanto verde. Creo que los Pirineos no dejan pasar ni gota al otro lado.
Llego pronto a Sarrance. Es un pueblito de unos cien vecinos, en el Valle de Aspe. Hay carnicería, me dicen que no hay panadería, un restaurante, un Gîte, el albergue del monasterio que es donde voy a quedarme y el Eco Museo del Valle del Aspe.
Cuando llego está lleno de Boys and girls scouts. Acampan cerca y como llueve están en el salón. Todos chicos jovencitos que a pesar de su corta edad ya hablan francés perfectamente.
La persona que me ha apuntado me ha preguntado el nombre, pero no la edad. Al rato he mirado el libro y me había puesto cincuenta y nueve. Cuando lo he vuelto a ver y le he preguntado me ha dicho que eran los que aparento. Mañana dejaré cinco euros de propina.
Sigo solo en un cuarto con seis camas en tres literas. Me quedo a media pensión.
Como en el restaurante. En una única foto me cabe todo el pueblo. Hay un Musée pero ya no quiero ver más piedras ni vasijas rotas y recompuestas. Regreso empapado, sigue lloviendo.
Y nada que hacer, ningún sitio a donde ir, nadie con quien hablar. No hay que exagerar, llamo a la familia, llamo a los amigos, leo el Heraldo de Aragón, el Periódico de Aragón, el País. Me pongo al día en política española y veo que Rajoy sigue de presidente. Es un monasterio antiguo pero con WiFi.
La hora de cenar, siendo pronto como es, a las siete y media, se hace esperar. Las comidas de restaurante me dejan con hambre.
La previsión del tiempo para mañana dice que diez grados y mucha agua. Al final no me escapo de Francia sin mojarme, hasta ahora he tenido mucha suerte con eso.
Llega la cena. Somos dieciséis a la mesa. Preside un cura con hábito blanco. Es el Frère Pierre Moulia, de la Orden de Canónigos Premostratenses. Estamos cinco peregrinos, tres que vamos andando y dos en bici. La cena, como todas las comunitarias muy buena y abundante.
Al terminar de cenar uno de los peregrinos de a pie me dice que si mañana podemos ir juntos. Pues si, claro que podemos.
Más tarde viene a mi habitación,… que si se puede salir más tarde, que le gustaría orar. Pues nada, que ore. Saldremos a las ocho. Todavía no se como se llama.
Pues mañana, día de Santiago Apóstol, iremos a Borce, son veintidós kilómetros y se sube trescientos metros en todo el recorrido. No hay mucha pendiente. Aún así la ponen como de seis horas. No será para tanto.
Hoy he pasado por:
- Oloron Sainte Marie
- Bidos
- Gurmençon
- Sarrance
Estoy hospedado en:
Sarrance
Albergue de peregrinos del Monasterio de Sarrance
Place de l’Eglise
Tel.: +33 559 347 117
st-norbert-accous@hotmail.fr
Si queréis hablar directamente con Frère Pierre, su movil es +33 642 352 513
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